sábado, 18 de febrero de 2012

Eterna noche

La eterna noche me devolvió mi otoño

tan olvidado, tan mío.

Entre sus pedregosas cuestas

te encontré tirado

¿dónde te había perdido?

Te hiciste tan mayor

que apenas si te reconozco

pero quien sino me iba a dibujar,

bajo la caída de incontables hojas.

la canción de mi mismo.

En callejuelas de aromas verdes

pude ver otra vez

los colores olvidados

en tu tatuaje mas oculto,

hecho en esa porosa piel

desgastada como la acera,

era un diablo abrazando a un espejo.

Aunque todo sigue siendo un sinsentido

miro, sin ganas, espero, lo prohibido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario